Libros de Maj Sjöwall
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❤️ Biografía de Maj Sjöwall
Escritora sueca. Después de trabajar como periodista, trabajó en una editorial, donde conoció a su futuro marido, Per Wahlöö, con quien escribiría 10 novelas. Es traductora.
Además de varias novelas en solitario, Sjöwall también es conocida por las colaboraciones mencionadas anteriormente. Desarrolló el género de la novela negra de forma habitual, pero lo utilizó para hacer una crítica social del sistema político sueco y del capitalismo en general.
Sus textos son muy concisos y a la vez muy dinámicos. Destacan sus novelas protagonizadas por el detective Martin Beck, considerado una gran influencia para una generación de escritores policiales escandinavos.
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Roseanna inicia en una cálida tarde de julio, cuando el cuerpo de una joven es extraído de las cristalinas aguas del hermoso lago Vättern, en Suecia. Tres meses después, todo lo que el inspector Martin Beck ha logrado descubrir es el nombre de la chica, Roseanna, su lugar de origen en Lincoln, Nebraska, y la inquietante posibilidad de que cualquiera de las ochenta y cinco personas que viajaban con ella en el barco podría ser el responsable de su estrangulamiento.
El personaje del inspector Martin Beck es ampliamente reconocido por lectores y críticos, y ha servido de inspiración para escritores como Agatha Christie y Henning Mankell. Con traducciones a treinta y cinco idiomas, se han vendido más de diez millones de ejemplares de sus obras en todo el mundo.
El inspector Beck se encuentra a punto de iniciar sus ansiadas vacaciones cuando recibe una noticia que cambia por completo sus planes. El reconocido periodista sueco Alf Matsson ha desaparecido misteriosamente, sumiendo a todos en un mar de incertidumbre. La última vez que se le vio fue en Hungría, lo que lleva a Beck a iniciar su investigación en ese país. Sin embargo, pronto descubre que esta pista es falsa, lo que lo deja perplejo y con más preguntas que respuestas.
Intrigado por los eventos que rodean la desaparición de Matsson, Beck comienza a sospechar que podría estar involucrado en un caso de espionaje comunista. Sin embargo, se encuentra con una resistencia inesperada por parte de la policía local, quienes parecen estar obstaculizando su investigación. ¿Qué secretos se esconden detrás de este misterioso suceso? ¿Por qué la policía parece estar encubriendo la verdad?
"El hombre que se esfumó" (1966) emerge como una obra maestra del suspense, donde cada página está cargada de acción frenética y giros inesperados. La fina ironía impregnada en cada línea y la habilidad del autor para captar magistralmente los ambientes, transportan al lector a un mundo lleno de intrigas y conspiraciones.
A medida que Beck se sumerge más en la investigación, se encuentra con un laberinto de engaños y manipulaciones, donde nada es lo que parece. Cada pista lo acerca un poco más a la verdad, pero también lo aleja de su tan anhelado descanso. La tensión aumenta con cada página, manteniendo al lector al borde de su asiento y sin aliento hasta el final.
Con una trama admirablemente construida, "El hombre que se esfumó" cautiva no solo por su intriga, sino también por la profundidad de sus personajes y la complejidad de sus relaciones. Cada giro del argumento revela nuevas capas de la historia, manteniendo la atención del lector en todo momento.
Esta entrega, la perturbadora tercera entrega de la saga detectivesca encabezada por Martin Beck, emerge como un hito en la narrativa del género negro. Iniciada en los convulsos años sesenta, esta serie ha servido de inspiración para gran parte de la literatura criminal contemporánea. En este caso, nos encontramos con un sombrío panorama en los aparentemente apacibles parques de Estocolmo, donde alguien ha desatado una ola de terror al perpetrar atroces crímenes: el asesinato de niñas tras haber abusado de ellas. La ciudadanía, consternada, se ve sumida en la angustia y el temor.
Martin Beck, incansable inspector de policía, enfrenta el desafío con dos testigos: un desalmado delincuente renuente a colaborar y un niño de apenas tres años, cuya capacidad para aportar información resulta limitada. El arduo trabajo de la policía parece estancarse, y con cada día que transcurre, crece la amenaza de un nuevo homicidio. Sin embargo, en medio de la desesperanza, Beck recuerda un detalle, algo que había pasado desapercibido, una pista que podría ser clave en la resolución del caso.
Este thriller, marcado por un ritmo implacable, entrelaza la brutalidad del crimen más inhumano con la humanidad de aquellos encargados de enfrentarlo. La perseverancia, la frustración y el horror se entrelazan en una trama policial tan conmovedora como cautivadora. En ella, se vislumbra el retrato de hombres y mujeres comprometidos con la búsqueda de la justicia, enfrentando sus propios demonios en una carrera contrarreloj para detener al responsable antes de que sea demasiado tarde.
Escrito originalmente en 1968 en Suecia, "El policía que ríe" nos traslada a Estocolmo, en pleno fragor de las protestas antiamericanas. En una noche tumultuosa de noviembre, un desconocido abre fuego dentro de un autobús, segando la vida de ocho personas y su conductor.
Las autoridades pronto sospechan de un asesinato en masa.
¿Pero es pura casualidad que uno de los fallecidos sea un policía fuera de servicio? ¿Acaso se encontraba en el lugar inapropiado en el momento inoportuno? ¿O es posible que estuviera siguiendo tan de cerca al asesino que este decidiera darle caza?
Una serie de sucesos trágicos envuelven la vida de un grupo de ladrones de vehículos comunes. Uno de ellos yace sin vida en una habitación ordenada y limpia. Dos agentes de policía irrumpen en la vivienda después de forzar la cerradura. Al lado del teléfono, tan solo dos palabras escritas: Martin Beck.
El jefe inspector de la Brigada de Homicidios de Estocolmo se desconcierta al ver su nombre en ese contexto. Mientras tanto, a pocos kilómetros de distancia, uno de sus hombres, Gunvald Larsson, está a punto de convertirse en héroe. En medio de la noche, el edificio que vigila estalla en llamas. Con valentía, Larsson rescata a varios heridos con sus propias manos, entre ellos dos ladrones y dos prostitutas.
Sin embargo, uno de los fallecidos ya estaba muerto antes del incendio, otro caso de suicidio. ¿Qué está sucediendo realmente? El rastro de uno de los fallecidos lleva a Larsson hasta una banda internacional dedicada al tráfico de vehículos robados. Pero, ¿cuál es la conexión con Martin Beck? ¿Quién es el misterioso exterminador?
Viktor Palmgren, un influyente magnate de los medios suecos, dueño de múltiples empresas y especulador financiero, se ve envuelto en un violento suceso que sacude los cimientos de la ciudad. Su reputación, ya de por sí cuestionable debido a las sombras que acechan su honestidad y la legalidad de sus negocios, se ve empañada aún más cuando, en medio de una cena en el prestigioso hotel Savoy de Malmö, es víctima de un disparo en la nuca. El brutal asesinato deja perplejos a los presentes, mientras el perpetrador escapa velozmente en bicicleta, desafiando a la justicia con su audacia.
A pesar de la presencia de una docena de testigos, las declaraciones y el análisis balístico resultan insuficientes para identificar al culpable material del crimen. En este escenario de incertidumbre y caos, Martin Beck, el respetado jefe de la Brigada de Homicidios de Estocolmo, entra en escena. Atravesando una crisis en su vida personal, Beck no duda en ofrecer su ayuda a su amigo y colega, el inspector jefe Per Mansson, quien lidera la investigación del caso, cuya importancia trasciende los límites policiales para adentrarse en el ámbito social, político y económico de la ciudad.
En esta sexta entrega de la aclamada serie de diez novelas protagonizadas por Martin Beck, escrita por Sjöwall y Wahlöö y traducida a más de treinta idiomas, el género policial se convierte en un vehículo para una crítica incisiva de la sociedad neocapitalista. A través de las diferentes tramas y personajes que componen el entramado policial, los autores exploran las frustraciones, las ambiciones y las experiencias del cuerpo policial, planteando interrogantes sobre la moralidad y la justicia en un mundo marcado por el poder y la corrupción.
"El Asesinato en el Savoy" no es solo un thriller lleno de suspense, sino también una reflexión profunda sobre la naturaleza humana y los límites éticos en un contexto donde los intereses económicos y políticos pueden llegar a justificar actos extremos. Sjöwall y Wahlöö desafían al lector a cuestionar sus propias convicciones morales mientras los personajes luchan por desentrañar la verdad detrás del crimen, en un juego de intrigas y revelaciones que mantendrá al lector en vilo hasta la última página.
Con una prosa ágil y una trama meticulosamente construida, "El Asesinato en el Savoy" es una obra maestra del género policial que no solo entretiene, sino que también invita a la reflexión sobre las complejidades de la sociedad contemporánea y los dilemas éticos que enfrentamos en un mundo dominado por el poder y la ambición.
Cuando un experimentado policía sueco fallece de manera violenta en un hospital, el comisario Martin Beck asume que resolver el caso será pan comido. El cuerpo del difunto, marcado por heridas profundas de bayoneta, sugiere que ha sido víctima de un desquiciado que se ha ensañado con él sin piedad.
No obstante, Beck irá conectando los puntos a medida que avance la investigación del brutal asesinato, descubriendo de pronto un historial de abusos y brutalidad policial que no pone precisamente en un pedestal a la víctima. En esta séptima entrega de la saga protagonizada por el comisario Martin Beck, Sjöwall y Wahlöö dan un giro sorprendente a la moral burguesa de su Suecia natal.
Dos crímenes sin resolver, tres agentes de policía en aprietos y un asesino suelto dispuesto a volver a matar. El comisario Martin Beck y su equipo se encuentran en una encrucijada donde nada parece estar conectado, aunque todo indique lo contrario: un banco ha sido atracado en una parte de la ciudad, mientras que en otra se ha hallado un cadáver en una habitación herméticamente cerrada, sin arma ni indicio alguno en la escena del crimen.
¿Podría la situación ser aún peor? Efectivamente, en una novela de Martin Beck, todo lo malo tiene la oportunidad de empeorar hasta llegar a su resolución final.
Esta es la octava y antepenúltima entrega de la serie de novelas policíacas protagonizadas por el comisario Martin Beck, un ícono creado por la pareja de escritores Maj Sjöwall y Per Wahlöö. Originalmente escrita en 1972 y ambientada en su Suecia natal, esta apasionante historia ha sido aclamada como una de las mejores de la serie, tanto por su doble trama magistralmente entrelazada como por su sorprendente desenlace.
El inspector Martín Beck se encuentra constantemente acosado por los espectros del pasado. En medio de la investigación del brutal asesinato de una mujer, se ve obligado a enfrentarse nuevamente a dos figuras que creía haber dejado atrás: Folke Bengtsson, un viejo conocido que una vez estuvo entre rejas gracias a él y ahora es el principal sospechoso del crimen, y Ake Gunnarson, un periodista que siempre ha representado un obstáculo en sus investigaciones, y que en esta ocasión no hace más que complicar aún más un caso basado en meras conjeturas, mientras la presión mediática solo añade más peso sobre sus hombros.
Mientras tanto, en las bulliciosas calles de Malmö, la tragedia golpea con fuerza cuando un agente de policía cae abatido en un tiroteo con una banda de jóvenes delincuentes. Una muerte que clama justicia y venganza, sumiendo a la ciudad en un estado de consternación y desasosiego.
En medio de este torbellino de eventos, Martín Beck y su equipo se ven enfrentados no solo a la tarea de resolver un crimen, sino también a lidiar con sus propios demonios internos. El peso del pasado se hace sentir con cada paso que dan, y cada revelación solo parece abrir nuevas heridas en sus ya maltrechas psiques.
Pero a pesar de las adversidades, Beck sigue adelante, decidido a llevar a los responsables ante la justicia, aunque eso signifique enfrentarse a sus propios fantasmas una vez más. Con la determinación como su única arma, se sumerge en las profundidades de la oscuridad, persiguiendo la verdad sin importar las consecuencias.
Porque para Martín Beck, la justicia no es solo un deber, es una obsesión. Y mientras respire, no descansará hasta que se haga justicia, incluso si eso significa enfrentarse a los fantasmas del pasado una vez más.
Cuando la justicia falla y la policía se ve desbordada, solo queda la esperanza en un milagro. Esta fue la reflexión que posiblemente cruzó la mente del comisario Martin Beck cuando le asignaron la tarea más desafiante de su carrera policial: coordinar la protección de un senador estadounidense durante su visita oficial a Estocolmo.
Tanto los recientes ataques ocurridos en el país como la prominencia del político generaban un temor latente en las autoridades sobre la posibilidad de un acto terrorista. El comisario Beck se hallaba ante un caso sumamente delicado, entre presiones políticas, el acoso mediático y la amenaza constante de un atentado terrorista, consciente de que un fracaso pondría en jaque a toda Suecia.