‘28 años después’ es una gran película post-post-apocalíptica y la clave, aunque no lo parezca, está en los ‘Teletubbies’
Esta noticia ha sido escrita por Roger Casadejús Pérez.
EL ENFOQUE POST-POST-APOCALÍPTICO
‘28 años después’ se distancia de ser un simple tributo nostálgico, proponiendo en su lugar una perspectiva innovadora sobre cómo las sociedades se reorganizan después de un apocalipsis. A través de detalles minuciosos, Boyle y Garland nos llevan a un mundo donde los humanos han encontrado una forma de convivencia sostenible a pesar de la amenaza zombie.
La película utiliza de manera creativa la tecnología moderna, como los iPhones, para narrar su historia, destacando el proceso de reconstrucción social y jerárquica en un mundo devastado. La incorporación de un protagonista joven, interpretado por Alfie Williams, añade una capa de profundidad al explorar su crecimiento personal en un entorno hostil y su cuestionamiento de los impulsos humanos hacia la barbarie.
LA CONEXIÓN CON LOS 'TELETUBBIES'
En un sorprendente giro, '28 años después' introduce a los 'Teletubbies' en su narrativa, no solo como un elemento de distracción para los niños en medio del caos, sino como un símbolo de la inocencia perdida. El uso de este programa infantil resuena con las teorías que sugieren que los Teletubbies viven en una tierra regenerada tras un desastre apocalíptico, lo que añade una capa de ironía y reflexión sobre la posibilidad de reconstrucción de la sociedad.
La escena de los niños viendo 'Teletubbies' en un refugio mientras el apocalipsis se desata afuera subraya una crítica al deseo de volver a un estado primitivo y optimista, representado por las amables criaturas del programa. Esta referencia cultural cuidadosamente integrada por Garland no es accidental, sino una declaración sobre la necesidad de encontrar esperanza y orden en medio del caos.
‘28 AÑOS DESPUÉS’: ATASCADOS EN LA INFANCIA Y LO PRIMITIVO
La sociedad que emerge '28 años después' del ataque zombie logra ser sostenible, pero plantea preguntas sobre si realmente es una utopía. A través del viaje del joven protagonista, la película pone en duda el retorno al primitivismo como solución, reflejando discursos contemporáneos sobre la masculinidad tóxica y la falsa épica.
El contraste entre los ideales de los padres del protagonista y su propia percepción de la realidad refleja un conflicto generacional sobre la forma en que se debe reconstruir la sociedad. La película explora cómo los jóvenes pueden quedar atrapados en sus referencias culturales, creando cultos incluso en torno a figuras problemáticas.
CONCLUSIÓN
‘28 años después’ no solo es una continuación digna de su predecesora, sino una exploración audaz del post-post-apocalipsis. Utilizando elementos culturales como los 'Teletubbies', la película desafía nuestras percepciones sobre la reconstrucción de la sociedad y la pérdida de la inocencia.
La habilidad de Garland para integrar detalles culturales en su narrativa y cuestionar las estructuras sociales establecidas convierte a esta película en una obra relevante y provocativa. Aunque divisiva en algunos aspectos, ‘28 años después’ destaca como una de las películas más comentadas y fascinantes del año.
REFERENCIAS
- La leyenda urbana de los Teletubbies - PopMatters