La fotógrafa mexicana Graciela Iturbide, distinguida con el Premio Princesa de Asturias de las Artes 2025 por su “mundo hipnótico”
Esta noticia ha sido escrita por Roger Casadejús Pérez.
BIOGRAFÍA DE GRACIELA ITURBIDE
Nacida en la Ciudad de México el 16 de mayo de 1942, Graciela Iturbide creció en un entorno donde la riqueza cultural de su país natal se entrelazaba con las influencias de una familia tradicional. Desde una edad temprana, mostró interés por las artes, lo que la llevó a estudiar cine en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Sin embargo, fue su encuentro con el legendario fotógrafo Manuel Álvarez Bravo lo que cambió el rumbo de su carrera hacia la fotografía.
Iturbide trabajó como asistente de Álvarez Bravo durante varios años, un periodo que describió como fundamental para su desarrollo profesional. Bajo su tutela, aprendió no solo las técnicas fotográficas, sino también la importancia de la narrativa visual y la paciencia para esperar el momento perfecto.
LA OBRA DE GRACIELA ITURBIDE
La obra de Iturbide es conocida por explorar temas como la identidad, el ritual y la vida cotidiana en México. Una de sus series más icónicas es "Juchitán de las Mujeres" (1979), un estudio sobre la comunidad zapoteca en Oaxaca, que resalta el papel central de las mujeres en esta sociedad matriarcal. Sus fotografías no solo documentan, sino que también ofrecen una reflexión profunda sobre las tradiciones y la resistencia cultural.
ESTILO FOTOGRÁFICO
El estilo de Iturbide se caracteriza por su uso del blanco y negro, que le permite centrarse en las formas, las sombras y las texturas. Sus imágenes, a menudo impregnadas de simbolismo, trascienden lo meramente documental para convertirse en obras de arte que invitan a la contemplación. Su enfoque es analítico y poético, creando una conexión entre el espectador y el sujeto.
PROYECTOS DESTACADOS
Además de "Juchitán de las Mujeres", Iturbide ha realizado numerosos proyectos importantes. "Los Que Viven en la Arena" (1981) documenta a los seris, un grupo indígena del desierto de Sonora, mientras que "Fiesta y Muerte" (2008) aborda la celebración del Día de los Muertos, capturando la mezcla de alegría y solemnidad que caracteriza a esta tradición.
RECONOCIMIENTOS Y PREMIOS
A lo largo de su carrera, Graciela Iturbide ha recibido numerosos premios y distinciones que avalan su contribución al arte y la cultura. Entre ellos se encuentran el Premio W. Eugene Smith de Fotografía Humanista en 1987 y el Premio Hasselblad en 2008. El Premio Princesa de Asturias de las Artes 2025 se suma a esta lista de honores, reconociendo su capacidad para capturar la complejidad de la vida humana a través de su lente.
EL PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS DE LAS ARTES 2025
El jurado del Premio Princesa de Asturias destacó la capacidad de Iturbide para crear un "mundo hipnótico" a través de sus imágenes, subrayando su habilidad única para revelar lo extraordinario en lo cotidiano. Este galardón no solo celebra su maestría técnica, sino también su compromiso con la exploración y la representación de diversas culturas.
IMPACTO DE GRACIELA ITURBIDE EN EL ARTE Y LA CULTURA
El trabajo de Graciela Iturbide ha tenido un impacto significativo en el mundo del arte y más allá. Sus fotografías no solo han ampliado la comprensión del público sobre la cultura mexicana, sino que también han influido en generaciones de fotógrafos que buscan capturar la esencia de sus propios entornos culturales.
CONTRIBUCIÓN A LA FOTOGRAFÍA DOCUMENTAL
Iturbide ha desafiado las convenciones del género documental al infundir sus imágenes con una sensibilidad artística que trasciende los límites tradicionales. Al hacerlo, ha establecido un nuevo estándar para la fotografía documental que enfatiza tanto el contenido como la forma.
LEGADO CULTURAL
El legado de Iturbide se extiende más allá de la fotografía. Su obra ha sido objeto de exposiciones en museos de renombre internacional, como el Museo de Arte Moderno de Nueva York y el Centro Pompidou en París. Además, su enfoque en las culturas indígenas y las tradiciones mexicanas ha ayudado a preservar y promover estas ricas herencias culturales en un mundo cada vez más globalizado.
CONCLUSIÓN
Graciela Iturbide ha transformado la manera en que percibimos el mundo a través de la fotografía. Su reciente reconocimiento con el Premio Princesa de Asturias de las Artes 2025 es un testimonio de su impacto duradero y su habilidad para capturar la esencia de la humanidad en todas sus formas. A través de su lente, Iturbide continúa inspirando a nuevos artistas y fascinando a audiencias de todo el mundo, consolidando su lugar como una de las fotógrafas más influyentes de nuestro tiempo.